El Prozac también puede servir para tratar el ojo vago en adultos

Un estudio de investigadores italianos y finlandeses demuestra que el antidepresivo más popular ayudó a unas ratas recuperarse de la ambliopía

El popular antidepresivo Prozac podría servir también para tratar de forma efectiva a aquellos adultos que sufren de ojo vago u ambliopía, de acuerdo a un estudio internacional que esta semana publica Science.

En su comunicación a la revista, los científicos italianos y finlandeses que firman el informe aseguran que este medicamento ayudó a corregir la vista de aquellas ratas adultas en las que ésta se había desarrollado de forma deficiente durante su juventud, y sugieren que el efecto podría reproducirse en humanos.

La ambliopía, comúnmente conocida como ojo vago, es por su parte la causa más frecuente de discapacidad visual en la niñez, y afecta a aproximadamente un 3% de la población infantil de Estados Unidos. Si no es tratada correctamente en ese momento -obligando a trabajar al ojo "vago"-, la enfermedad se convierte en permamente y sin tratamiento posible durante cuando el paciente se hace adulto.

Entrando en detalles, los investigadores señalan que el Prozac parece actuar sobre el cerebro de los roedores, devolviendo a las neuronas de su cerebro a un estado más "plástico", que sólo suele observarse en individuos jóvenes. De esa manera, indican, el sistema de percepción visual puede crear nuevas conexiones neuronales entre el ojo y el cerebro.

Se se demuestra que el mecanismo es el que indican los investigadores, eso ayudaría a explicar también cómo funcionan los medicamentos del tipo de Prozac sobre el estado de ánimo de los pacientes deprimidos al actuar sobre la plasticidad de su cerebro.

El Prozac pertenece a una clase de compuestos denominados "inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina" (SSRIs), fue desarrollado en 1987 y actualmente su patente ha caducado, por lo que cualquier compañía puede producirlo bajo el nombre de fluoxetina.
Publicado por ADN en abril de 2008

El Prozac controla la esclerosis múltiple

( Nota del Martes 13 de mayo de 2008 )
Buenos resultados de una investigación científica innovadora

AMSTERDAM (DPA).— El antidepresivo Prozac puede retrasar los síntomas de la esclerosis múltiple (EM), revela un estudio de investigadores holandeses de la Universidad Real de Groninga publicado en la última edición del “British Medical Journal”.Probaron la medicina durante una investigación con un grupo de control: pacientes que sufren la grave enfermedad degenerativa del sistema nervioso central. A la mitad se les administró Prozac (fluoxetina) y a la otra mitad no.Cada cuatro semanas, el grupo era sometido a una prueba de escáner para ver si se hallaban nuevas inflamaciones cerebrales, un signo del avance de la EM.Después de cuatro semanas, los pacientes que recibieron un placebo tenían más inflamaciones en comparación con aquellos enfermos tratados con Prozac.Al final del estudio, tras 24 semanas, dos tercios de las personas que recibieron Prozac no tenían nuevas inflamaciones, comparadas con el 25% de quienes recibieron un placebo. Más de un millón de personas en el mundo sufren de esclerosis múltiple, enfermedad progresiva que hace que el paciente vaya empeorando poco a poco y de forma irreversible.Como ya publicamos, los científicos mexicanos Adolfo Martínez Palomo y Julio Sotelo Morales descubrieron que la esclerosis múltiple es causada por el virus que origina la varicela. “Con este hallazgo, la enfermedad más importante de la neurología va a estar controlada”, según Sotelo.

SÍNTESIS DE NMP, UN PRECURSOR DEL PROZAC



Se pesan dos gramos de cloruro de 3- dimetilaminopropiofenona, la sal del compuesto 1, en un vaso de precipitado de 100ml. Se coloca este vaso en una placa agitadora con un agitador magnético y 10 ml de agua. Se agita hasta la completa disolución. Siguiendo con agitación, se añaden un exceso de una disolución acuosa de NaOH al 10% (5-6 ml); lo suficiente para que la disolución tenga un pH aproximado de 10. El compuesto 1 precipitará en forma de aceite lechoso. Se continúa con agitación y se añaden 9-10 ml de EtOH al 95% para volver a disolver el compuesto 1.

En un vaso pequeño, se añaden 10 ml de agua y se le añaden 3 gotas de NaOH al 10%. A continuación, se añaden 0,40 g de borohidruro sódico y se agita hasta su completa disolución. Seguidamente, y sin dejar de agitar, se añade esta disolución de borohidruro a la disolución del compuesto 1. Se deja agitar la disolución durante unos 15 minutos, hasta asegurarse de que la reacción ha terminado.

Con mucha precaución, se añade gota a gota una disolución 6 M de HCl, para destruir el exceso de NaBH4. Se necesitan aproximadamente unos 5 ml de ésta. Ahora, tenemos una disolución acuosa de la sal del compuesto 2.

Se necesita el compuesto 2 en forma libre para que reaccione con 3. Para obtener la base libre, se vuelve a hacer básica la disolución, añadiendo sosa al 10%. Van a ser necesarios unos 15 ml para neutralizar la reacción, y unos 5-7 ml más para tener pH 10. A continuación, se agita la mezcla en hielo, para enfriarla a temperatura ambiente, y se transfiere la disolución a un embudo de decantación. Se añaden 20 ml de dietiléter agitando bien y se separa en fases.

Se guarda la fase superior en un vaso y se extraen las de abajo con porciones de éter. Se añade la segunda extracción al vaso que contiene la primera. Se elimina la fase acuosa y se seca la fase de éter con MgSO4. Se filtra la disolución de éter utilizando un embudo con algodón. El filtrado se deposita en un matraz.

Se usa un aparato de destilación con agitador magnético para eliminar el éter. La mayor parte del éter se evapora a 36ºC, pero se debe continuar la destilación hasta 55-60º. El aceite descolorido que queda en el matraz es el compuesto 2, con algunos residuos de éter. Se quita el agitador y se guarda el producto en un frasco de color ópalo. Dependiendo de la cantidad de éter que le quede, el compuesto 2, debe solidificar como una cera blanquecina, en unos días.

La disolución de 2, tras unos días, se añade a un matraz de fondo redondo de 100 ml. A éste se añaden también un agitador, 4 ml del compuesto 3 y 30 ml de dimetilacetamida. A esta disolución se le añaden, en agitación continua, 30 ml de terbutóxido potásico 1 M, en alcohol terbutílico. Usando un aparato de destilación simple, se destila la mezcla lentamente, con agitación, durante unos 15-20 minutos hasta una temperatura de 150ºC.

A continuación, se enfría la mezcla introduciéndola en un baño de agua fría. Se añaden 40 ml de agua y 30 ml de éter en el matraz, se agita hasta que se disuelve y se coloca la mezcla en un embudo de decantación. Se deja reposar para que se separen las fases. La fase acuosa se añade a un vaso de 100 ml, y la fase etérea en otro. Se devuelve la fase acuosa al embudo y se añaden 10 ml de éter. Se deja decantar de nuevo y se separan las dos fases en sendos vasos. Se realiza esta operación varias veces, y se reúnen todas las extracciones etéreas en un vaso de 100 ml. Se añade la disolución etérea al embudo y se lava varias veces con porciones de agua, tal y como se hizo con la fase acuosa.

Una vez lavada, se seca la disolución etérea con MgSO4, y se coloca en un embudo de adición que contiene algodón.

Para la síntesis de 4, se disuelven 0,85 g de ácido oxálico anhidro en 15 ml de etanol absoluto, en un vaso de precipitado de 100 ml. Se agita la mezcla colocándola bajo el embudo de adición, y, con agitación vigorosa se añade gota a gota la disolución etérea anterior, hasta que empieza a aparecer un precipitado insoluble. Por lo general, esto es un material blanco floculento.

Se para la adición y se agita el contenido del vaso durante unos minutos. Cuando la formación del precipitado se detenga, se sigue con la adición de la fase etérea con agitación. Si fuera necesario, se harán adiciones de pequeñas alícuotas de 5 ml de alcohol absoluto.

Cuando se completa la adición, se quita el agitador y se deja reposar el producto durante 5 minutos en un baño de hielo. A continuación, se filtra a vacío, con un embudo Büchner y se separan los cristales del compuesto 4. Se lavan con éter y se dejan secar al aire guardándolos en un mueble.

Daniel M. Perrine,1 Nathan R. Sabanayagam, and Kristy J. Reynolds
Department of Chemistry, Loyola College in Maryland, 4501 N. Charles St., Baltimore, MD 21210-2699